Sera que mi Dios
me castiga por atacar el
tiempo imaginario
Será que mi Dios,
me extiende su mano y
derrocha su manantial
He visto el castigo de
las sombras
de las sombras tristes
que caminan.
He visto a Lucas pasear
su pequeña y descontrolada imaginación en el tiempo
Sonrisas, pesares, simplezas, escucha...
Amor de sonrisa imaginaria,
en un caracol de colores
me mire a mí mismo en el
espejo y sonreí
imaginaba un mismo cuarto imaginario,
en que las mismas rosas
del tiempo
se devolvían en el camino
Se disemina el tiempo, las
banalidades de la vida
se escapan solas en el aire
el azadón,
las manos encarnadas del
espíritu siguen ahí
Se golpeó mi triste inspiración
se acostó triste ayer en
la mañana
¿Por qué las nubes de colores
se volvieron sonrosadas; y Las
hormigas de colores se prendaron de mi pecho
Las manos sangrantes de sueños,
Una flor, un verso.
Luis Carlos Zamora cano
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