Vi mi inspiración embolatada estaba de vacaciones, como que no le gusto tanto los comentarios que hicieron sobre ella entonces la estuve buscando por todas partes.
Levante el tapete de mi almohada ahí a veces la encuentro con los pies completamente cruzados colocándomelos sobre la cabeza y no la vi.
Busque un tubo de cristal y no se encontraba ,estaba ahora así de vacaciones, dejo una nota hasta que no hagas una poesía de esas que sabes hacer pero que recuerden todos no me llames estoy enojada contigo, porque le respondí, me dijo, soy de tu espíritu poeta, me asomo en los cristales de las casas y los convierto en vidrios en los que caen, estrellas, todas las mañanas cuando me levanto te hago soñar ,muevo tu razón la pongo a navegar, imagínate que hasta el caleidoscopio de colores en el que a veces duermo , se fue también de aburrimiento.
Entonces le dije que hago saco una vara de pescar imaginaria, y cazo una poesía, en segundos, no me dijo ella no me olvides solamente, abrázame cuando estés solo y estés triste ya que muchas veces no tienes a nadie.
Y le dije es que pienso que nadie me va a escuchar, que las personas me van a mirar como una cosa rara porque hago poesías.
Y entonces ella me respondió te regalo mi DIOS, una mota de algodón pequeña cuando naciste, adentro de esa mota de algodón un cristal, adentro del cristal un espejo, y te miraste tus ojos en el imagínate todo lo que tienes y que está completamente olvidado.
El rio se llena, la represa también el poeta debe expresar, y si no expresa sonreír si no sonríe, la mota, el espejo, y los ojos se desprenderán en pedazos imaginarios, los pájaros dejaran de trinar en su interior.
Y entonces le pregunte hasta cuando vas a volver imaginación y ella me dijo estoy contigo, lo que me preocupa es el tiempo, es la huella, que tu dejes, conoces las huellas del camino… cierto todo mundo quiere dejar.
No busques la más gran huella, busca la más humilde y ella perdurara.
Luis Carlos Zamora Cano.
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